Cuando te dejas llevar por la rutina diaria a lo largo de las semanas, meses y años, llega un punto en el que dices: ¿cuál es mi propósito en la vida? ¿qué es lo que quiero hacer hoy? y ¿por qué quiero hacerlo? En definitiva te replanteas todos los ideales sobre los que sostienes la vida que has construido, tu vida, esa vida que te pertenece por el mero hecho de ser irrepetible y única desde el momento en el que naciste.
Puede que a menudo olvides que cada instante que pasa es momento que se esfuma, se desvanece, desaparece y no volverá a repetirse. Pero claro esto no sucede si vives en plenitud, desde la responsabilidad de hacer aquello que quieres hacer y siendo consciente de que eres el resultado de tus propias decisiones.
Somos el resultado de nuestras propias decisiones y nuestro futuro es la suma de todas ellas. Con cada acción que haces hoy, ahora, ya! estás modelando tu futuro.
Como dijo el primer premio Nobel de ciencias español Santiago Ramón y Cajal “somos arquitectos de nuestro propio cerebro“, y esto es así literalmente. Reforzando esta idea, el catedrático neuro-científico Francisco Mora Teruel afirma que se ha demostrado que el binomio aprender-memorizar es capaz de modificar nuestro cerebro gracias a la creación o refuerzo de las conexiones entre las neuronas.
Ésta es una noticia muy positiva ya que sólo dependes de ti para influir en tu futuro, por ello ¿qué mejor momento que ahora? para modificar tu actitud, ajustar tu enfoque y alinear tus pensamientos con la acción diaria para lograr así tus objetivos.
5 Hábitos para impactar en tu futuro
1. Cada día haz algo distinto para conseguir resultados diferentes
Conseguirás salir de tu zona de confort, mejorando tu creatividad y experimentando una sensación agradable antes de ir a la cama cuando pienses en todo lo que has hecho durante el día. Por ejemplo: Aprender algo más sobre un nuevo idioma, elegir un recorrido distinto si practicas running, dedicar un tiempo a una habilidad que tenías abandonada como puede ser dibujar, tocar un instrumento musical o aprender sobre aquello que habías pensado y que aún no has comenzado.
2. Hacer, hacer y hacer!!! … sin importar el resultado
De esta forma iniciarás ese proyecto, idea o tarea que tienes en mente aunque no sepas cómo empezar, céntrate en el qué quieres hacer y para qué quieres hacerlo, los cómo se irán resolviendo por el camino. Si esperas el momento adecuado te estarás engañando a ti mismo porque ese momento nunca llegará, siempre estarás inventando una excusa nueva para sentirte más preparado, diciéndote a ti mismo cosas como: no comenzaré hasta que no acabe la carrera, hasta que no estudie el máster adecuado, hasta que no consiga una estabilidad laboral y así sucesivamente estarás aplazando tus objetivos sin poder salir de ese círculo vicioso. Por ello haz, hazlo ahora, ya! porque el momento idóneo nunca llegará.
3. Enfócate en lo que es prioritario para ti
Hay una frase muy buena de Steven Covey que resume este concepto: “céntrate en las rocas y deja de perder el tiempo en la arena“. Concéntrate sólo en el objetivo más importante, enfoca todos tus sentidos en conseguir ese reto prioritario para ti.
Para explicar de forma rápida la idea de este punto se me ocurre una analogía entre coche-tú y destino-objetivo. Conduce tu coche por la autopista directa hacia tu ciudad destino, sin cruces, sin desvíos hacia carreteras secundarias que te distraerán por el camino, te aseguro que así conseguirás alcanzar tu meta.
4. Determinación frente al desaliento
Cada día insiste, no te canses, mira hacia adelante y no olvides que cada paso que das estás más cerca de tu meta. Aunque te encuentres inconvenientes por el camino, si miras hacia atrás y te das cuenta de todo lo que has superado, no verás baches sino oportunidades para seguir aprendiendo y alcanzar tu objetivo, diciéndote a ti mismo: si pude, puedo y podré!!!
5. Tapones para los oídos que filtren los consejos tóxicos
Por el camino te encontrarás gente que se centra en el cómo en vez del qué y para qué. Son expertos en hacerte ver las ciento y una maneras de cómo tu objetivo puede fracasar. Por ello filtra todos los mensajes negativos, ten especial atención a quién le cuentas tus ideas y evita las conversaciones en las que vez de motivar… desalientan, en vez de aportar…se quejan, en definitiva, evita las conversaciones tóxicas que derrumban tus proyectos antes de haberlos comenzado. El mundo actual no se ha construido gracias a las personas realistas, se ha conseguido por la incansable labor de personas optimistas, perseverantes y visionarias de lo posible frente a lo imposible mediante el intento, error y aprendizaje aportando así valor a nuestra sociedad.
¿Qué hábitos recomiendas para ser el dueño de tu propia vida?
¿Añadirías alguno más?
Como dijo Mahatma Gandhi “se tú el cambio que quieres ver en el mundo“, me quedaré satisfecho con que te quedes con una idea: se tú ahora el cambio que quieres ver en tu futuro. Ya no existen excusas para modificar tu presente e impactar positivamente en tu futuro, ahora tienes la oportunidad de tomar acción, decidir por ti mismo, dar un paso al frente y decir: “aquí estoy yo, soy el dueño de mi propia existencia y voy a crear la vida que realmente quiero vivir“.
Comenta, no te cortes, escribe lo que tengas que escribir, di lo que tengas que decir, haz lo que tengas que hacer, pero hazlo ahora, ya!!! HoySIquePUEDES!!!
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